Las declaraciones realizadas por la secretaria de Organización de los nacionalistas tinerfeños y diputada autonómica, Rosa Dávila acusando al presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, de decir soterradamente que quería «engullir la Autoridad Portuaria de Tenerife«, por lo que manifestaba que “podríamos estar ante una OPA hostil de la Autoridad Portuaria de Las Palmas para hacerse con la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife”, y que ella pone en boca de Luis Ibarra en una declaraciones que nunca existieron, han tenido una respuesta contundente del sector, del propio presidente de la Autoridad Portuaria e indirectamente del presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife, que el pasado mes en la Feria Wind Europe declaraba a este medio que los puertos en alusión a Las Palmas y Tenerife tienen que «trabajar mano a mano, porque hay trabajo para las dos autoridades portuarias».
En la rueda de prensa posterior a las reunión que mantuvo Dávila y otros representantes de Coalición Canarias en la CEOE Tenerife, dejó claro que «no vamos a permitir que se engulla la Autoridad Portuaria de Tenerife» y que exigirán explicaciones en el Parlamento de Canarias y en Madrid, y de ser cierto el caso, manifestó el rechazo al mismo, por parte de su partido.
Siendo fiel a los hechos, Ibarra, ante la pregunta de un representante de la patronal regional Fedeport (Federación Canaria de Empresas Portuarias) en el evento organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) celebrado hace unos días en Las Palmas, en la que le solicitaba su posición ante la posibilidad de colaboración entre ambos puertos para un mejor desarrollo de las infraestructuras canarias ante el colapso del Puerto de Las Palmas, el presidente portuario respondía que sería deseable que el trabajo desarrollado por Las Palmas en la captación de nuevos negocios, como era el caso de convertir a Canarias en un hub agroalimentario entre Sudamérica, África y Europa pudiera ser aprovechado por Puertos de Tenerife, porque aún disponen de espacios para este desarrollo. Y se brindaba a colaborar en este sentido con la entidad tinerfeña.
Este medio ha tenido la oportunidad de recabar la opinión de Luis Ibarra en relación a estas declaraciones de la representante de Coalición Canaria, y ha mostrado su sorpresa y extrañeza ante las mismas, sobre todo de «alguien que no estuvo en la Jornada», y que inventan expresiones como las que ha oído, de «engullir», o de «opa hostil», y matizó que el Puerto de Las Palmas no podrá afrontar algunos proyectos en los que ha trabajado y el objetivo era mostrar su total predisposición a que esos proyectos se queden en el ámbito de Canarias, y de ahí el ofrecimiento a Tenerife.
Quienes si estuvieron fueron algunos de los representantes de Fedeport que han manifestado a este medio que «No vemos ningún punto de colisión entre las cadenas de suministro de Tenerife y de las Palmas, antes al contrario, lo que vemos es la máxima colaboración para que sectores como el eólico u otros, se desarrollen en cualquiera de los puertos de Canarias, aunque entendemos que por la dimensión de estos proyectos eólicos en concreto, se desarrollarán en ambas provincias dada la magnitud y requerimiento de espacios portuarios del mismo».
La exposición de Ibarra sobre el futuro portuario de Las Palmas en líneas generales fue muy aplaudida en el marco de la jornada y fuera de ella en círculos portuarios. Aunque como en toda comunidad siempre hay voces discordantes, quizá porque no satisface sus expectativas o porque las decisiones del órgano portuario tiran por la borda alguna línea de negocio que se presentaba como muy atada y no lo estaba tanto. La concurrencia de diferentes proyectos de eólica marina offshore obliga a la Autoridad Portuaria a convocar un concurso para esos 100 mil metros cuadrados que tiene disponible y deja fuera la solicitud inicial de un operador de ocupar 80 mil metros cuadrados para dedicarlos a un proyectos sin mucho sustento, aunque si han trascendido las gestiones que se hacían para convertir en un mercadillo de talleres y empresas de reparación naval esa parcela solicitada, a modo de pool de servicios pero sin un proyecto sólido detrás.