La Asociación de Consignatarios y Estibadores de Buques de Las Palmas, Asocelpa, ha convocado una asamblea general extraordinaria para mañana jueves a primera hora, con un único punto en el orden del día, en el que se analizará y debatirá «sobre la interposición de recurso contencioso-administrativo contra el acuerdo del Consejo de Gobierno de Canarias de 14 de julio de 2022 de separar a Agustín Manrique de Lara como vocal del consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Las Palmas como representante de las organizaciones empresariales relevantes en el ámbito portuario y designar a Pedro Ortega en su sustitución.
A nadie se le esconde ya, a estas alturas, que no es por defender a Agustín Manrique de Lara por su labor en el Consejo, o por poner en cuestión la labor de Pedro Ortega en el mismo. Su batalla, y ya van tres si ésta sale adelante finalmente, es la de reclamar para Asocelpa la representación de las organizaciones empresariales relevantes en el ámbito portuario.
Hubo un tiempo en el que hasta la propia Autoridad Portuaria se planteaba la posibilidad de trabajar para ampliar la representación empresarial en el consejo del puerto, un tiempo, claro, en el que la patronal de los consignatarios tenía cierto peso y credibilidad.
Hoy por hoy, una Asociación desnortada, sin demasiada credibilidad en el sector, que ha ido sufriendo la fuga de asociados de entidad e incorpora apenas nuevas empresas consignatarias, difícilmente podrá reclamar para sí ser los «valedores» de los intereses portuarios.
A este paso lo único que conseguirá es seguir aligerando su peso asociativo y engordando su estantería de recursos sin sentido.
La Asamblea de mañana contará con la participación del asesor jurídico de la Asociación, Enrique Moreno.