La naviera noruega Solvang presentó el 16 de enero en Singapur un sistema de captura y almacenamiento de carbono (Carbon Capture and storage, CCS) instalado a bordo de uno de sus buques, el Clipper Eris. La operación se ha llevado a cabo durante la varada del buque los últimos meses en el astillero Seatrium y a principios de febrero tendrán lugar las primeras pruebas piloto.
Según Edvin Endresen, consejero delegado de Solvang ASA, “la captura de carbono a bordo combinada con la tecnología existente de sistemas de depuración de gases de exhaustación (scrubbers) es un atajo importante para la descarbonización de la flota mundial de alta mar. Es una de las soluciones más prometedoras para los buques del futuro”.
El sistema instalado a bordo del Clipper Eris, un gasero para el transporte de GLP de 18.898 GT construido en 2019 y abanderado en Noruega, depura los gases de exhaustación, reduciendo las emisiones de CO2 hasta en un 70% antes de almacenarlo en sus tanques de cubierta para su posterior secuestro o utilización.
Este proyecto piloto es fruto de la colaboración entre Solvang, Wärtsilä, MAN Energy Solutions y el instituto de investigación SINTEF. Solvang tiene siete nuevos buques en construcción, todos ellos diseñados y preparados para la instalación de estos sistemas de captura de carbono.
Para el consejero delegado de Solvang hay dos factores que resultan fundamentales para favorecer el éxito de la tecnología CCS en el transporte marítimo: la infraestructura y la normativa. “El CO2 puede reciclarse y utilizarse en las industrias terrestres, pero hay que desarrollar rápidamente la infraestructura mundial de descarga en los puertos. Además, la OMI debe implantar una normativa mundial con penalizaciones y recompensas en función de las emisiones acreditadas. La previsibilidad es necesaria para que la industria invierta en soluciones para reducir las emisiones de CO2”, concluyó Endresen.