El Puerto de Bilbao ha cerrado 2023 con un tráfico de 32,8 millones de toneladas, lo que representa un crecimiento acumulado del 0,11% con respecto a 2022 sustentado, principalmente, en los tráficos de graneles líquidos y sólidos.
Este crecimiento ha estado lastrado por un mes de diciembre excepcionalmente complicado por el mal tiempo, que ha provocado retrasos en la entrada de barcos. Se ha producido, concretamente, la pérdida de más de medio millón de toneladas y 21 escalas durante el mes. Solo los días 1 y 2 de enero entraron trece buques que debían haber atracado en diciembre. Sin estos retrasos, el cierre del año se hubiera situado en un 1,7%.
Pese a este contratiempo, el Puerto de Bilbao se beneficia de su carácter multipropósito, de su especialización para mover todo tipo de mercancías independientemente de su naturaleza, volumen, peso o complejidad y, por ello, consigue mejores resultados en los tráficos que la media de Puertos del Estado, que se sitúa en -3,3%, con descensos en ocho de los doce principales puertos. Igualmente, el comportamiento del tráfico de contenedores (-0,9%) es más positivo que la media de los puertos del sistema portuario español (-5,5%).
Cabe destacar que el Puerto de Bilbao no es un puerto de tránsito, al contrario que otros grandes enclaves. Bilbao ocupa el tercer puerto en exportaciones con 8,3 millones de toneladas, por detrás solo de Valencia y Barcelona, y por delante de Cartagena o Algeciras. Es tercero, igualmente, en cuanto a importaciones con 21,3 millones, por detrás de Cartagena y Tarragona, y por delante de Barcelona o Valencia. Estos datos refrendan su importancia para la economía de su zona de influencia y su fortaleza como puerto logístico-industrial. En este sentido, el 38% de la superficie concesionada está destinada a empresas industriales, que fabrican o transforman materiales en producto final en sus muelles, de sectores mayoritariamente energético y eólico.
Al hecho de ser un puerto con capacidad y experiencia para mover todo tipo de tráficos en el que se dan la mano el transporte, los servicios, la logística y la industria, se une la política comercial de la Autoridad Portuaria, también al servicio de su hinterland, que da prioridad a tráficos de alto valor estratégico, aunque sumen menos toneladas, como las cargas de proyectos, entre los que destacan los componentes eólicos. En 2023 entraron a las instalaciones del Puerto 3.600 transportes especiales, una media de diez al día.
Aumento de los graneles
Por envases, los graneles líquidos, pese al descenso de la producción de la refinería de Petronor por su parada técnica, aumentan un 1%. Los graneles sólidos crecen un 4,4% y destaca la exportación de coque de petróleo y la importación de los cereales y sus harinas.
La mercancía general baja casi un 4%. Dentro de la mercancía convencional crece la maquinaria y los materiales de construcción. Por su parte, la mercancía en contenedor que presenta un mejor comportamiento son también los materiales de construcción y, pese al descenso del 3%, este también es menor que el de la media del sistema portuario estatal, que cae cerca del 5%.
En términos absolutos, los tráficos que más crecen son: el gasoil, los cereales, los materiales de construcción, los biocombustibles, las habas de soja y el pienso y forrajes. En el lado contrario, los que más descienden son el crudo de petróleo, el fueloil, los productos químicos, las bebidas, el cemento y clínker, y el papel y la pasta.
Líderes con Reino Unido e Irlanda
Los principales mercados en tráfico total, que incluye líquidos, son Estados Unidos (12% del tráfico), Brasil (9%), Rusia (8%), Reino Unido (7%) y México (6%). Los países que más crecen son Noruega (importaciones de petróleo y gas), Brasil (importación de petróleo), Nigeria (importación de gas), Bélgica (exportaciones de productos petrolíferos y minerales), India (importación de gasoil y siderúrgicos) y México (importación de petróleo y exportación de siderúrgicos). El Puerto de Bilbao se mantiene líder en tráficos con Reino Unido e Irlanda, y el 33% del tráfico español pasa por este enclave.
Más barcos y pasajeros
El movimiento de buques se cierra con 2.738 escalas, lo que implica un aumento de 96 barcos (+3,6%). El tamaño de los buques (GTs) ha experimentado un crecimiento del 9% por el aumento del número de portacontenedores, de los cruceros y por los nuevos buques de carga rodada más sostenibles de las navieras Finnlines y Brittany Ferries.
El número de pasajeros/as crece un 26,5% y se sitúa en 270.771. Los de línea regular (ferris con Reino Unido e Irlanda) presentan un crecimiento del 16%, es decir, 17.059 pasajeros/as más que en el 2022; mientras que el tráfico de pasajeros de cruceros alcanza, con 80 escalas, un total de 149.032 (+36%) turistas, lo que supone un récord para el Puerto de Bilbao.
El 29% de los contenedores ya utilizan el tren
En 2023 operaron 4.238 trenes en el Puerto de Bilbao, una cifra similar a la de 2022, que supone una media de casi 12 trenes al día. La cuota de contenedores que entran o salen por ferrocarril vuelve a crecer y pasa de 27 al 29%, lo que le afianza como líder del sistema portuario. Este crecimiento y la apuesta por el tren va en línea con uno de los grandes objetivos de UE para promover la descarbonización.
Por ello, desde 2022 la Autoridad Portuaria gestiona la circulación y las maniobras en el dominio portuario con el objetivo de mejorar la operativa ferroviaria y en 2023 ha llegado a otro acuerdo con Adif en la Terminal de contenedores que aún gestiona. En concreto, han firmado una encomienda para que la Autoridad Portuaria gestione las operaciones relacionadas con las operaciones de carga, el control de accesos y la atención telefónica y telemática a operadores, reforzando así la colaboración entre ambas administraciones y dando continuidad a la estrategia de seguir mejorando los servicios del puerto.
Asimismo, la Autoridad Portuaria se suma a las iniciativas tanto del Gobierno vasco como de las Cámaras de Comercio para unir fuerzas de cara a avanzar en el proyecto del Corredor Atlántico. De igual modo, espera que pronto se impulse el proyecto de la variante sur de mercancías.
Recta final de la ampliación e inicio de la electrificación de los muelles
La inversión realizada por la Autoridad Portuaria a lo largo de 2023 ha ascendido a 18,7 millones. Las más relevantes han sido la prolongación del Muelle AZ1 (4,3 millones), el relleno en el Espigón central (3,15 millones), el refuerzo de la estructura de puente de la N644 a la altura de la obra de toma de Iberdrola (2,2 millones), las relaciones Puerto Ciudad (1,9 millones) y la red de Saneamiento por vacío en el Abra Exterior (1,78 millones, de los 20 millones de inversión hasta 2025).
La previsión de inversión para el 2024 es de 77,8 millones, una cifra elevada por el inicio, entre otras obras, de la segunda fase del Espigón central que aportará 30 nuevas hectáreas en un Puerto con alto grado de ocupación y gran demanda. El aprovechamiento integral del Abra exterior entrará, así, en su última fase. Se espera licitar las obras en Semana Santa, una vez reciba el proyecto el visto bueno del Consejo de Ministros, por un importe de 54,4 millones de euros y un plazo de ejecución de 26 meses. La adjudicación podría ser en verano y el inicio de las obras, en el último trimestre del año.
Paralelamente, en el marco del Plan de Transición Energética del Puerto de Bilbao y con la intención de alcanzar los objetivos establecidos de reducción de emisiones, se está llevando a cabo la electrificación de muelles con el fin de que los buques puedan conectarse a la red eléctrica y apaguen, así, sus motores, lo cual
reducirá las emisiones de CO2, los ruidos y las vibraciones. La primera fase del proyecto BilbOPS, centrada en el muelle A-5 del Espigón Central, se adjudicó en diciembre por un importe de 4,7 millones de euros y cuenta con una subvención de 4,3 millones del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia.
La iniciativa BilbOPS, que se prevé entre en funcionamiento en 2026, requiere una inversión de 78 millones, de los cuales 14,2 serán subvencionados por la Comisión Europea dentro del programa de ayudas CEF Transport 2021-2027. El proyecto lleva asociado que el 20% de la energía generada sea renovable con la intención de que ascienda al 50% en 2028.