Trasmapi posterga sus planes de expansión fuera de las Islas Baleares hasta que obtenga garantías del Puerto de Algeciras. Aprovechando una «oportunidad», la compañía ibicenca vendió recientemente el catamarán de alta velocidad con el que tenía previsto operar la ruta entre Algeciras y Ceuta, lo que habría marcado su primera incursión más allá de las Baleares. La venta del catamarán Incat 045, con capacidad para 900 pasajeros y 200 automóviles, informada previamente por Ferrybalear y confirmada por fuentes de la empresa a La Voz de Ibiza, no indica que Trasmapi haya abandonado por completo sus planes de establecer esta ruta en el Estrecho, siempre y cuando se le otorguen los permisos necesarios.
La venta se considera una «oportunidad» debido a que la embarcación había estado atracada en el puerto de Vigo durante más de un año, a la espera de la resolución de una reclamación patrimonial presentada por Trasmapi contra la Autoridad Portuaria de Algeciras. El catamarán, que mide 86 metros de eslora por 26 metros de manga, puede alcanzar velocidades de hasta 40 nudo. La compañía naviera griega Seajets adquirió la embarcación.
Trasmapi justifica esta operación de venta al señalar que la compra y venta de barcos forma parte integral del negocio naviero. Habían adquirido el catamarán con la intención de operar en el Estrecho, pero decidieron posponer esta operación hasta que cuenten con garantías por parte de la Autoridad Portuaria de Algeciras. Mantener la embarcación en espera habría resultado en costos significativos para la empresa. Desde Trasmapi expresaron su satisfacción con la transacción, lo que sugiere que fue rentable para la compañía.
Además, la empresa reafirma su interés en el mercado y su disposición a aprovechar oportunidades futuras. Como ejemplo, mencionaron la adquisición de dos barcos en una subasta en Alaska destinados a la ruta Alcúdia-Ciutadella. Afirman que, una vez obtengan las garantías necesarias para operar en el Estrecho, planean adquirir otra embarcación.
Trasmapi tenía programado comenzar las operaciones en junio de 2022 en el Estrecho a través de la empresa Ceuta Lines. Para ello, habían hecho la propuesta de aval correspondiente a Marina Mercante, que lo aprobó y tan sólo estaban pendientes de la autorización de la APBA para depositarlo, y se habían comprometido a operar durante al menos dos años, dado que se trata de una ruta de interés general. Sin embargo, la negativa de la Autoridad Portuaria de Algeciras frustró sus planes.
Trasmapi considera que la denegación de los permisos por parte del puerto de Algeciras es «incomprensible», ya que el argumento de falta de espacio para operar resulta «inverosímil». Como respuesta, la compañía ha presentado una reclamación patrimonial contra el puerto de Algeciras por la denegación de atraque en Algeciras en Mayo de 2022, para cubrir la ruta Algeciras-Ceuta, alegando obras y falta de línea de atraque para garantizar la operativa, al buque de Ceuta Lines, marca vertical de la naviera Pitiusa. Desde esa fecha el buque se encontraba amarrado en Vigo, hasta su venta. La naviera reclama ser compensada por los daños económicos causados por la imposibilidad de operar y por tener su catamarán parado. Además, busca garantías de igualdad de condiciones respecto a otras navieras una vez que obtenga los permisos necesarios.
En la actualidad, Trasmapi opera rutas entre Ibiza y Formentera, a través de su matriz y su filial Formentera Lines, anteriormente conocida como Mediterranea Pitiusa, así como la ruta Alcúdia-Menorca a través de Menorca Lines.