«Yo creo que nadie duda del nivel que tienen nuestros puertos, sobre todo el Puerto de la luz y de Las Palmas que, evidentemente, está en una posición de las más altas dentro del sistema portuario»
Tras casi dos años al frente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Beatriz Calzada hace balance de su gestión y de los principales retos que enfrenta el puerto. La falta de personal, la necesidad de más recursos y la transformación del puerto en un hub estratégico para el comercio intercontinental son algunos de los temas que analiza en esta entrevista. También aborda proyectos clave como la FP dual, la ampliación de infraestructuras y el futuro de la eólica marina.
Después de casi dos años en el cargo, ¿qué es lo que más le ha sorprendido del Puerto de Las Palmas?
Venía preparada para algo muy complejo y mucha actividad, pero lo que me ha sorprendido positivamente es la cantidad y variedad de actividad que hay en el puerto. La profesionalidad y el reconocimiento internacional de muchas de las empresas que operan aquí es impresionante. También me ha llamado la atención la falta de personal, tanto en la parte privada como en la Autoridad Portuaria. Por eso hemos puesto en marcha el proyecto de Formación Profesional Dual, para cubrir la demanda de profesiones altamente especializadas y de enorme de futuro para nuestra gente.
En la parte de Autoridad Portuaria también falta personal, falta estructura. Este puerto necesita una estructura mucho mayor, por eso es nuestra solicitud de pasar a formar parte del grupo 1, para poder tener una estructura que realmente de respuesta a lo que necesita un puerto de este nivel.
Hablando de ésto, uno de sus objetivos es que el Puerto de Las Palmas pase al Grupo 1 de Puertos del Estado. ¿Cómo avanza este proceso?
Estamos elaborando los informes que nos han pedido para justificar esta solicitud. El objetivo es dotar al puerto de una estructura mayor que permita atender la cantidad de servicios que ofrecemos. Al ser un puerto multipropósito, el mayor de España, necesitamos más recursos humanos y herramientas para mejorar la digitalización y la eficiencia burocrática. La decisión final la tiene Hacienda y el Consejo de Ministros, pero confiamos en que Puertos del Estado vea viable nuestra propuesta.
Cuando tú tienes tanta variedad de servicios, tienes que tener personas que puedan estar enfocadas en cada uno de sus servicios para darle la respuesta adecuada a cada uno para ser mucho más eficiente.
Yo creo que nadie duda del nivel que tienen nuestros puertos, sobre todo el Puerto de la luz y de Las Palmas que, evidentemente, está en una posición de las más altas dentro del sistema portuario.
En los últimos años, varios proyectos han estado en el aire, como la granja de pulpo, la central de Totisa, la terminal de cruceros o el espacio de la energía eólica. ¿En qué punto se encuentran?
Cada uno tiene su propio ritmo. La granja de pulpos sigue en manos del Gobierno de Canarias y del Ministerio, pendientes de la Declaración de Impacto Ambiental, y la empresa nos ha dicho que no han descartado este proyecto. que estaban replanteándose algunas cosas pero ellos seguían apostando por el proyecto.
La terminal de cruceros de Santa Catalina estará terminada a finales de año y será la más grande de Europa y un referente internacional. Además, será una terminal sostenible y eficiente energéticamente. Ha sido construida teniendo en cuenta muchos muchos elementos sobre todo nuestros alisios para que por ejemplo no haya que estar utilizando aire acondicionado, cosa que es muy muy positiva con los últimos avances.
A esto se suma que ya están finalizadas la terminal de Fuerteventura y las dos de Lanzarote.
¿Esto va a implicar incrementar el volumen de cruceros o ya estamos saturados?
En el caso de Las Palmas, de lo que estamos hablando es de poder tener cuatro cruceros a la vez operando. Ahora mismo, a veces hemos tenido cuatro, pero alguno más pequeño alguno que no necesita tanta tanto servicio. Con esto vamos a poder tener cuatro con absoluta comodidad.
¿Y el proyecto de Totisa?
En el caso de Totisa, siempre digo lo mismo. Hubo personas que consideraron que era viable para el puerto en el año 2019 y se continúa con él, con todo el proceso para el otorgamiento de la concesión. A fecha de hoy, yo ni siquiera he entrado a valorar el proyecto porque creo que ya fue valorado en su día. Lo que el puerto necesita sí o sí es garantizar que tenemos suficiente energía para poder dar el cold ironing, la electrificación de nuestros muelles, para avanzar en la descarbonización y eso a día de hoy nadie nos lo garantiza, con lo cual necesitamos que alguien nos garantice que vamos a tener la energía suficiente y que no vamos a afectar al resto de sistema insular.
Esa es la primera cuestión y además también ligado a esto, nosotros tenemos que ser capaces de poder suministrar combustible alternativo hasta llegar a combustible 100% verde. Hay un gran debate sobre cuál va a ser este combustible.
Este puerto es uno de los puertos con más capacidad en el suministro de biocombustibles. Tenemos aquí algunas de las empresas que están siendo líderes en ese sentido, pero el combustible alternativo aceptado a nivel mundial es el gas natural licuado y nosotros tenemos que tener capacidad por lo menos de suministrarlo.
Nosotros seguimos trabajando como si el proyecto de Totisa no se fuese a hacer. Si no lo podemos generar, tenemos que poder almacenarlo para suministrar. Esos son nuestros retos. En la medida en que nosotros resolvamos esos dos puntos, estaremos en una situación mucho mejor y tenemos que ser capaces de dar respuesta a estos dos elementos porque nosotros no nos podemos permitir perder rutas.
¿A qué se debe tanta oposición al proyecto?
Aquí ha habido mucha movilización contra el proyecto. Además, el Cabildo y el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria se han posicionado públicamente en contra, cosa que no ha ocurrido en el proyecto de Totisa en Tenerife, que es prácticamente el mismo.
En el caso de la eólica marina, parece que ha habido avances en el suelo destinado a ella, ¿es así?
En relación a la eólica marina, ya hemos recuperado suelo para desarrollar una industria auxiliar que respalde el crecimiento del sector en Canarias.
Había dos suelos, uno en el que ya había una concesión otorgada y el otro que se sacó a concurso y se había quedado desierto. En este último una empresa, Boluda & Suárez, presentó una propuesta de adjudicación directa que es la que se está tramitando.
Son dos parcelas independientes, pero lo lógico es que terminen uniéndose y eso ya estaba contemplado cuando se sacó ese concurso y estaba contemplado en el pliego, porque al final el puerto lo que tiene es que poner a disposición del desarrollo de la eólica marina la mayor cantidad de suelo posible. De esta manera, el puerto va a poder poner a disposición unos 170 mil metros cuadrados.
Además que tengan aguas profundas que tengan una zona. No un canal de entrada amplio para que puedan entrar, pues esos barcos que aquí los vemos habitualmente los buques que llega y son buques de grandes dimensiones. Necesitan mucho espacio para poder cargar y descargar.
¿Me puede confirmar que Puertos del Estado ha decidido que los puertos estratégicos para el desarrollo de la eólica marina son A Coruña, Castellón y Las Palmas?
Eso nos han dicho a nosotros. No hay una comunicación oficial, pero en distintos foros se ha mencionado que esos tres puertos serán claves. Nosotros estamos preparados para liderar este desarrollo y atraer inversores internacionales.
Independientemente de eso, entendíamos que siendo el primer desarrollo previsto en España en el sureste de Gran Canaria, el puerto mejor situado es el Puerto de Las Palmas por muchas circunstancias, pero sobre todo porque ya hay un proyecto que se está empezando a desarrollar en adjudicación directa con unos operadores que ya tienen experiencia y que está atrayendo a otros operadores a nivel internacional con más experiencia todavía.
Un proyecto muy serio porque no estamos hablando sólo de dar apoyo a lo que se desarrolla en el sureste de Gran Canaria. Estamos hablando de dar apoyo a cualquier desarrollo, sobre todo en nuestro entorno geográfico que se pueda desarrollar, especialmente en la costa africana.
¿Y en cuanto a las obras?
En este aspecto, se ha resuelto la ampliación del Dique Comercial en el puerto de Puerto del Rosario, que también era un expediente que estaba bastante atascado y ahora estamos ya en pleno proceso de adjudicación. Esperamos que las obras se puedan empezar lo antes posible.
También estamos terminando la ampliación de lo que era la cuarta fase Dique de la Esfinge en el Nelson Mandela, que en verano esperamos que ya pueda estar funcionando. Y tenemos ya también en marcha la ampliación del Dique Reina Sofía. De ahí se va a generar también una plataforma y más línea de atraque que también era un expediente que se estaba trabajando, y ya sale también.
Pasemos a otro punto. El Puerto de Las Palmas aspira a ser un hub comercial intercontinental. ¿Cómo se está trabajando en esta línea?
Nuestro reto es consolidarnos como un puerto de referencia para las conexiones entre Europa, África y América, sobre todo del lado americano de Sudamérica, para que quiera llevar su producto a África cuente con un puerto seguro desde el que operar. Tenemos unas rutas ya abiertas hacia África que también nos hacen ser muy muy atractivos. Y Contamos además con una posición geográfica privilegiada, seguridad jurídica y ventajas fiscales
Hemos establecido contactos con empresas sudamericanas interesadas en operar desde aquí y esperamos concretar más acuerdos en los próximos meses.
¿Y cómo afecta a esta situación la nueva política arancelaria que impulsa el Gobierno de Trump?
Tenemos que estar atentos a ver finalmente qué es lo que pasa. Esto va a hacer que ellos tengan también que reconducir sus exportaciones hacia otro lado del mundo. Eso es lo que les va a provocar esos aranceles. Y para nosotros es un reto.
Uno de los temas que preocupan al sector es la posible pérdida de conectividad por el sistema ETS. ¿Cómo avanza la negociación para una aplicación específica en Canarias?
Es un tema complejo. Hemos trabajado junto al Gobierno de Canarias y la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife para demostrar el riesgo real que supone la aplicación del ETS en su formato actual para Canarias. Bruselas nos ha dado hasta 2025 para aportar más datos. Lo que no podemos permitirnos es perder conectividad, y estamos centrados en demostrarlo con cifras y estudios. Lo que queremos es que los puertos canarios estén exentos de la aplicación de la tasa de emisiones, o al menos una aplicación adecuada a nuestra realidad
Esto es lo que nos está haciendo movernos más rápidamente. Hay un riesgo cierto de que determinadas rutas las podamos perder y tenemos que ser capaces de suplirlas con otras. Por eso también trabajamos en disponer de más línea de atraque.
Se ha hablado de la posibilidad de que empresarios canarios adquieran una participación en Naviera Armas. ¿Qué sabe al respecto?
No es la primera vez que se plantea, pero parece que esta vez se ha avanzado más. Tener una naviera con raíces canarias ayudaría a garantizar la conectividad marítima y a mantener rutas esenciales, aunque no sean rentables a corto plazo. Es un tema que seguiremos de cerca. Sería una buena noticia para Canarias.
Si tenemos o eso es lo que queremos pensar que tenemos a gente de la tierra ahí metida, que les duela Canarias y que entiendan la realidad canaria, van a entender que hay rutas que sin ser económicamente rentables hay que hay que mantenerlas, con lo cual si esto al final llega a ser una realidad, siempre va a ser una buena noticia.
Hablando de conectividad, ¿qué ocurre con la línea con Tarfaya?
El interés del Gobierno marroquí sigue presente, y el Estado ha destinado dos millones de euros en el Plan de Empresa 2025 para estudiar su viabilidad. Ahora estamos analizando qué infraestructuras y medidas de seguridad serían necesarias para que esta conexión sea una realidad.
¿Tiene esto algo que ver con la ruta de Tarfaya?
La línea de Tarfaya no es sencilla. Sigue habiendo interés por parte del Estado. Realmente yo le veo mucho más interés por parte del Estado y de hecho así ha sido en la medida en que en el plan de empresa del 2025 hemos tenido que incorporar una partida de unos dos millones de euros para iniciar trabajos de cara a la potencial viabilidad.El gobierno marroquí parece que también está muy interesado en esta línea.
A nivel de Canarias hay división según quien lo quien lo vea, en función de si se ve como una oportunidad o se ve como un como un problema.
Nosotros como puerto la parte que nos toca es la de hacer viable la entrada por Fuerteventura y eso nos implica no solo a la Autoridad Portuaria sino a todas las administraciones que tienen competencia para poner un PIF, por todos los medios de seguridad y de control que hay que establecer de Aduanas, Sanidad… Todo lo que conlleva son unas inversiones importantes y por lo tanto, nosotros lo que hemos iniciado es la parte portuaria.
Después está la parte empresarial, que ha mostrado interés en desarrollar este proyecto.
Para ir finalizando, ¿Le gustaría seguir al frente de la Autoridad Portuaria después de este mandato?
El puerto es maravilloso, en el mundo que siempre me ha gustado. Yo creo que lo intento transmitir cada vez que hablo.
El mundo del puerto, me parece muy atractivo y por supuesto, esto es una oportunidad única que me han dado para gestionar esta Autoridad Portuaria en concreto con la importancia económica que tiene para nuestra tierra y, en general, para todo el sistema portuario español. Este es uno de los mayores retos a los que me he enfrentado en mi carrera política.
Pero los nombramientos políticos dependen de muchas circunstancias. Si en el futuro se considera que soy la persona adecuada para continuar, me lo plantearé en su momento. Mientras tanto, mi objetivo es seguir trabajando por el crecimiento del puerto y consolidar su papel estratégico.
¿En qué estado se encuentra el proyecto del museo portuario y la FP dual?
Seguimos avanzando en ambos. El museo portuario es un proyecto que nos ilusiona mucho y que puede aportar un gran valor. En cuanto a la FP dual, estamos logrando el compromiso de empresas para garantizar su éxito. Queremos que esta formación cubra las necesidades del sector y permita cualificar a más personas en profesiones de alta demanda.
Avanzamos en dos frentes. Por un lado, la formación reglada que es el FP dual y por supuesto, siempre con el apoyo de las empresas porque el FPdual si no entra en las empresas está abocado al fracaso y en eso estamos trabajando.
Por otro lado, en certificados de profesionalidad estamos también en ello. Es una parte que tiene bastante complejidad, pero que también la hemos propuesto. Hemos hablado con algunas empresas sobre todo las que hacen formación. Es la forma de que la Autoridad Portuaria le dé el paraguas a toda esa formación no reglada que se está dando, de cualificación de las personas, para aprovechar el buen trabajo que ellas están haciendo porque aquí hay empresas que hacen mucho trabajo espectacular.
Ahora si que casi terminamos. ¿Cómo valora la relación con la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife?
Las relaciones no solo son buenas, son excelentes, pero además a diferentes niveles, o sea, no solo presidencia a nivel de dirección, a nivel de técnicos intermedios. Yo creo que las relaciones que tenemos son muy buenas, independientemente de toda esa competencia, pero es que el propio sistema portuario español tal como está establecido a lo que llama precisamente es a esa competencia.
Y aunque hay competencia entre puertos, lo importante es que Canarias tenga un sistema portuario fuerte y complementario. No tiene sentido que un barco se vaya a Huelva si puede recibir un servicio en Las Palmas o en Santa Cruz. Hay que trabajar juntos para retener todo el tráfico.
¿Sería viable una Autoridad Portuaria única para Canarias?
Prefiero no manifestarme, lo que sí opino es que nosotros tenemos que ser capaces de tener un sistema lo más fuerte posible y que nos complementemos lo mejor posible.
Lo importante es que cada uno refuerce su papel dentro del sistema portuario español y que trabajemos en conjunto cuando sea necesario para fortalecer a Canarias como hub logístico y comercial.