¿Cómo puede la comunidad logístico-portuaria corregir y minimizar los posibles impactos negativos que su actividad puede tener en el entorno? ¿Pueden los puertos convertirse en espacios proactivos y contribuir a la recuperación de la biodiversidad? ¿Podrían hacerlo generando además nuevas actividades económicas o mejorando costes? La respuesta es sí, y de nuevo la clave está en la tecnología.
El ecosistema portuario debe encontrar soluciones para compensar su impacto y hacer que sus operaciones se puedan considerar ocean friendly, un aspecto que, además, tiene un peso creciente en la consideración de smart port. Y esto es precisamente lo que plantea el proyecto Oasis, una solución integral multitecnológica digital para la transformación de las infraestructuras marinas en instrumentos de regeneración ambiental y de lucha contra el cambio climático. Esta iniciativa es el resultado de la colaboración entre Ocean Ecostructures, empresa especializada en el desarrollo de soluciones tecnológicas para la regeneración de la vida marina, ayudando a compensar y neutralizar el impacto de las actividades humanas en el océano, y Seabots, compañía que desarrolla tecnologías para la exploración digital del medio marino mediante vehículos autónomos (USV) sensorizados y que pertenece al Grupo GPA Innova.
Proyecto subvencionado por Ports 4.0 y finalista de los premios 4YFN 2024
Oasis fue uno de los proyectos seleccionados en la convocatoria de 2021 para ser subvencionado en la modalidad de proyectos comerciales por parte de Puertos del Estado en el marco del Plan de Impulso al Emprendimiento para la Innovación en el sector portuario (Ports 4.0).
Además, el potencial de este proyecto es tal que recientemente Ocean Ecostructures ha sido seleccionada como una de las firmas finalistas de los 4YFN Awards 2024, el evento de startups más influyente de Europa asociado al MWC Barcelona, cuyos ganadores se conocerán el 28 de febrero.
El proyecto Oasis, que fue presentado en la I Jornada Cátedra Smart Ports celebrada en el Puerto de Castellón, es la suma de cuatro grandes pilares tecnológicos: la tecnología BBS de regeneración de biodiversidad y de refuerzo de secuestro de carbono; la tecnología SB100 de captación de datos mediante USV de última generación; la tecnología Digital Hub de gestión y procesamiento de datos y de generación de gemelo digital mediante aplicación de IA; y la tecnología iOceans para el tratamiento, comunicación y gestión de los datos mediante herramientas front-end ajustadas a diversos perfiles (científicos, empresas, ciudadanos…).
Microarrecifes biomimétricos monitorizados digitalmente
Según explica Ignasi Ferrer, cofundador de Ocean Ecostructures, “con estas tecnologías, hablamos de microarrecifes biomimétricos monitorizados digitalmente. En este sentido, los científicos con los que colaboramos, la mayoría pertenecientes al ámbito del CESIC, han conseguido desarrollar una estructura que mimetiza la manera en que funciona un arrecife artificial. Esto incluye sistemas de atracción de microfauna –el mar es una gran sopa de microfauna buscando un lugar donde depositarse– y cobertura de carbonato cálcico, la mejor superficie para que la vida marina pueda aposentarse. También hablamos de un diseño multicapa para que pueda haber un efecto de protección. Todo esto se traduce en un extraordinario efecto de biorregeneración”. “Además, gracias a los sistemas robóticos, las imágenes que vamos capturando y el sistema de inteligencia artificial, podemos identificar también especies invasoras, así como medir la mejora en calidad del agua y la captura de CO2. Y recientemente hemos incorporado una nueva funcionalidad que es el cálculo del incremento del capital natural”, añade Ferrer.
Todos estos impactos ambientales son traducidos en impactos socioeconómicos tangibles. “De alguna manera, lo que estamos haciendo es crear smart regeneration. Es decir, somos la primera compañía en el mundo que está uniendo tecnología regenerativa con tecnología robótica, de digitalización y de inteligencia artificial para conseguir medir estos impactos y traducirlos en información inteligible y muy valiosa”, puntualiza Ferrer.
Avance del proyecto
Según comenta Ferrer, “hemos hecho las implementaciones de las primeras unidades en los puertos de Barcelona y Palma y ahora estamos trabajando en la optimización de todos los procesos para adaptarlos a los distintos entornos, porque, evidentemente, no es lo mismo una zona de bocana que una zona interior. También estamos llevando a cabo trabajos estructurales para incrementar la resistencia. Y todo ha sido diseñado pensando en las operaciones, por eso las unidades son removibles. Evitamos así interferir en cualquier ámbito de la operativa portuaria y respetamos todos los protocolos existentes”.
Progresivamente, entre este año y 2025, se irán incorporando sensores y nuevas funcionalidades al proceso, se continuará colaborando con Seabots y trabajando en capturar la mayor cantidad de datos para nutrir al algoritmo de manera que finalmente sea capaz de interpretar toda la información proporcionada.
Una solución para la comunidad portuaria
En definitiva, Oasis no solo supone compensar el impacto en el medio ambiente de las actividades portuarias, sino que además permite mejorar la estructura de costes y contribuir al cumplimiento de los requisitos ESG-Compliance.
Adicionalmente, los beneficios no solo alcanzan al ámbito portuario, sino también a otros en offshore, como las plataformas eólicas. Así, por ejemplo, según explica el responsable de Ocean Ecostructures, “al proporcionar información al ciudadano sobre el impacto real positivo de la infraestructura, con datos y con imágenes, conseguimos generar una cultura del conocimiento y, por tanto, aumentar el social engagement del entorno en el que se mueve el operador para que se sepa que se está actuando en positivo y que no se trata de greenwashing, sino que es algo real, tangible, que se puede visualizar”.
El proyecto Oasis fue presentado en el transcurso de la I Jornada Cátedra Smart Ports, que se celebró el 13 de diciembre en el Puerto de Castellón, con la colaboración de la Fundación PortCastelló y Puertos del Estado, así como con el apoyo de las entidades colaboradoras de la Cátedra Smart Ports, que son el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana, Boluda Corporación, Leatransa (Grupo Tervalis), Noatum, Materia (Grupo Quimialmel), Ocean Infraestructures Management, Portsur Castellón, Grupo Raminatrans y Simetría Grupo